Nací en Casillas de Coria, envuelto en lagrimas de pureza un 22 de Febrero de 1.949, de donde tuve que emigrar al País Vasco en el año 1.963, junto con mis Padres y Hermanos, ya que por aquel entonces la necesidad era obligada. Fue el año que mataron al presidente Kennedy. Pero 3 años antes, tuve que dejar la escuela para ponerme a trabajar y ayudar a la economía de la casa, que no era muy boyante, y había que trabajar arrancando jaras para los señores de antes, ya que si querías comer no había más remedio que doblar la rabadilla. Yo, que fui mal estudiante y pocas oportunidades que nos dio la vida, aquí me encuentro sin estudios académicos. Pero no son menos importante los estudios que me ha enseñado la vida, por ejemplo junto a mis Padres, que me enseñaron a ser persona y a tener dignidad, y caminar y hacer que caminen los demás, porque esa es mi visión de la vida, a través de los pueblos de su gente sencilla, de su belleza, rebuscando en los entresijos de la propia vivencia de la vida. Esta es mi poesía que me sale de mi adentro, como se dice en el argot flamenco, me sale de lo más jondo, y expresamos al dolor y la fatiga y a las penurias que hemos “pasao”, porque no nos olvidemos de donde venimos, del arado de la trilla del yunque y la fragua. Y como suelo decir yo: Soy amigo del viento, entre dos aguas me crié, soy de Casillas de Coria, de un rincón extremeño, por si ustedes lo quieren saber.



lunes, 18 de agosto de 2008

San Blas patrón de mi pueblo (1976)

San blas de Casillas de Coria
Foto de Pedro Utrera

Una mañana de invierno,
una campana al vuelo
un sol que rompe su cerco;
unos niños que murmuran,
vamos, Casíllanos!
vamos a subir a San blas a su trono.

Las mozas se ponen el velo,
los mozos el pañuelo,
y agarrado de la mano,
vamos a la fiesta del patrono.

Sube a paso lento la comitiva,
unas campanas que repican
una imagen que suplica,
fuego, fuego, porque soy
guerrero y curandero
y fiel a vuestro pueblo.

Ya en lo alto de la ermita,
banderas girando alrededor,
una flauta y un tambor
entonaban esta música
que dice: esta va,
por todos los ausentes de Casillas.


Poema de
Pedro Utrera.

Por qué nos odiamos tanto

Mi perrita Santa -Foto de Utrera.

PORQUE NOS ODIAMOS TANTO

Tal vez nos estemos olvidando
del pensamiento y la palabra,
de la dignidad y de valores
que nos inculcaron nuestros padres.
Quizás sin que nos demos cuenta
estemos aniquilando,
la falta de incomprensión
que nos esta llevando
al egoísmo y la hipocresía.
Hacia donde vamos,
porque todo lo que hacemos
lo hacemos crispados,
sin justicia, no hay paz, ni libertad.
Parece que nos da pavor
enfrentarnos a la realidad,
pasivamente preferimos callar,
para que no nos coja el toro,
y situarnos al otro lado de la orilla.
Decir patriota aquí en España,
es como tener una venda llena de prejuicios,
que no nos lleva a ninguna parte,
a diferencia de las ideas de cada uno,
donde ahí esta la verdadera
esencia de la libertad.
Ahora que toda Europa se une
nosotros todo lo contrario,
seremos más listos que nadie,
hagamos una reflexión,
para que nuestros pueblos
con su gente su cultura y su historia,
haga que prevalezca la filosofía sublime.
Planeta, o cambio climático,
la destrucción de la mano del hombre,
envenenamos los ríos,
quemamos los bosques,
construimos dentro de la mar
para enriquecerse más,
qué importa el Universo,
luego vendrá un maremoto,
y nos preguntaremos,
que habremos echo mal,
por qué nos odiamos tanto.


Poema de

Pedro Utrera

Lo llaman Pola el paisano

Foto de Pedro Utrera
Homenaje- a Costantino Pola Alvarez


Niebla y orballo,
Asturias de mis encantos,
paisano en el prado,
contempla su ganado.

La sidra fermenta despacio,
hay que darle el sabor necesario,
sus manos son de artesano,
y sensible como un ser humano.

Lo llaman Pola el paisano,
artillero y fiel a su trabajo,
como el perro fiel a su ganado.

Llevas nombre de pueblo asturiano,
todo lo das a cambio de un abrazo,
y la taberna su descanso.

¡¡Empina el codo que vas con retraso,
que la mina te espera paisano!!
una esposa que reza el rosario,
no duerme pensando en su amado,
el Perro triste se arrima a su lado,
esperando que venga el paisano.



Poema de

Pedro Utrera.

Nadie le enseño a amar

JESÚS EN SU ESTADO PURO

Camina por la Villa de Hervás,
un transeúnte,
que cuenta las historias,
hechas realidad.
Con su figura y sus andares,
no hay más que hablar; se trata,
de “Jesús el pastorcillo”
el de la sierra de Hervás.
En los años de fatiga y penumbra,
nadie le enseño a amar,
aprendió a tocar la flauta,
escuchando a los pájaros cantar.
Camina con su postura empalada,
para sentirse más cómodo,
y que su figura sea más igualada,
cubriéndose sus ojos con su boina calada,
haciendo ver a la gente
que la sierra, es su más fiel aliada
más , con su peculiar “dicharacheo”
y su garrota de “ogaranzo”,
y su flauta de bajo del brazo,
nos entonaba una melodía
entre música Árabe y sefardí,
donde los lugareños del lugar y forasteros
se quedaban prendados, de la figura insigne
de la flor y nata de Hervás.
Y desde ese mismo lugar
exclamaba diciendo a la gente:
"vela allí esta, la portilla del lobo,
donde yo hacia fuego,
para ahuyentar a los lobos,
y más abajo el chorro “jituero”
donde yo allí reflejaba,
las penas de mi sufrimiento".
Y desde su hábitat natural
esta es la historia,
de un hombre sencillo y cabal,
que en su época fue “marginao”
por ser diferente y “desgalbao”
este personaje tan peculiar
merece la pena que sea inmortal.
Poema de
Pedro Utrera.

Nadie es más que nadie

NIÑOS-MEDI
SUMIRADA LO DICE TODO


Soy un aficionado a la poesía,
soy poeta con faltas de ortografía,
dicen las malas lenguas,
que plasmo y rubrico de repente,
sin tener en cuenta al deprimente.
Maldita sea la incomprensión
de aquellos que alardean
y nada tiene que decir,
si están faltos de generosidad,
y de sentimientos nobles,
y su comportamiento es mezquino,
no herir la sensibilidad,
de aquellos que escriben
para hacerles más agradable la vida,
a todo ser humano que pasa
por esta senda de los seres vivos.
Pero no son menos importantes
los estudios que me ha enseñado la vida,
por ejemplo:
-junto a mis Padres que me enseñaron,
a ser persona y a tener dignidad,
y no como otros, que guiándose
por el desconocimiento y el ignorantismo
hacen que su cultura no llegue a las medianías.
Porque nadie es más que nadie,
sea un sabio, o sea un tardo,
ya que la dignidad del hombre
no esta solo en el saber
sino en la vida misma y en los valores
que nos hacen dignos al ser Humano.

Poema de
Pedro Utrera.

Morir en tus brazos

Foto de Pedro Utrera-

CANCHOS DE RAMIRO

Se me estremece el Corazón,
cuando pronuncian tu nombre,
y cuando estoy lejos de ti,
te defiendo hasta la muerte.

Mi Extremadura la bella,
corre y di le a tu gente,
que la lucha será larga,
y tu no eres diferente.

Que no hay nadie mas que nadie,
si con dinero quieren callarte,
que le pregunten a un niño,
si en el cielo somos todos iguales.

Porque ser extremeño es,
tener amor y dulzura,
y en las batallas perdías,
tenemos un corazón que ilumina.

Mi Extremadura la bella,
corre y di le a tu gente,
que la lucha será larga,
y tu no eres diferente.

Yo deje a mi Extremadura,
deje mi tierra y mi gente,
me fui a buscarme la vía,
y no pude dejar de quererte.

Adiós mi tierra quería,
A Dios le pido llorando,
que me aguardes cuando vuelva,
para yo morir en tus brazos.


Poema de

Pedro Utrera.

Me tiraste una flor


Desde tu ventana a la mía,
yo de ti me he enamorado,
sin conocerte vida mía,
prefiero seguir soñando.

Tu fuiste para mi,
como la brisa de la mañana,
que me trae el aire fresco,
que entra por mi ventana.

Me tiraste una flor,
cuando fuiste coronada,
tan grande fue tu amor,
que yo sin ti, no fui nada.

A dudas penas pude coger tu flor,
que tu a mi me lanzabas,
la gente ajena a nuestro amor,
sin darse cuenta me zarandeaba,
pero yo cogí tu flor,
y me embriague de tu fragancia.

Me seguías con la mirada,
cabizbajo yo balbuceaba,
que debo hacer amor mío,
si tu fuiste coronada,

Tenia miedo a tu hermosura,
tenia miedo a enfrentarme a ti,
me quede varado a la orilla,
y el silencio se hizo eco de mi.

Añil los campos con la primavera,
resuenan los yunques,
al compás de una gramola,
hasta los caños de la fuente lloran,
cuando te vieron partir,
con el roció de la Aurora.


Poema de

Pedro Utrera.

Manolo González Valle


MANOLO GONZALEZ VALLE

Muy pocas veces nos paramos a pensar,
que en nuestro entorno nos rodeamos de personajes,
que pasan desapercibidos,
como en el caso de nuestro amigo Manolo,
que por una fatal causalidad, paso de ser un héroe
a la fatalidad de su destino, que fue su muerte.
A veces miramos hacia otro lado,
sin que nos demos cuenta, se nos va la vida,
entre emociones de luces y de sombras,
como si se tratara de una comedia de pantomima
y de sueños de utopía,
que poco a poco los atardeceres
nos va guiando al final, del crepúsculo de la vida.
No puedo por menos mencionar,
a nuestro amigo Manolo González,
y hacerle este pequeño homenaje,
con humildad y respeto hacia su persona.
Va por ti Manolo,
en nombre mío personal, y en el de Casillas de Coria,
te damos las gracias, por gesto heroico
del accidente, que ocurrió entre Coria y Moraleja,
hace aproximadamente una veintena de años,
donde tu le salvaste la vida a nuestros conciudadanos
de Casillas de Coria,
de morir abrasados dentro del coche en llamas,
nunca olvidaremos que diste tu vida
sin pensar en las consecuencias del peligro que corrías.
fuiste un gran hombre, bueno afable y bonachón,
que Dios te bendiga, y te guarde un buen sitio
que a buen seguro merecido lo tienes,
porque gente como tu, tenéis ganada la plenitud,
sincera y entrega por los demás.
Gracias Manolo.

Poema de
Pedro Utrera.

LLevo sangre de Andalucía

LLEVO SANGRE DE ANDALUCIA


Pueblos blancos de mi Andalucía,
con su pureza blanca,
y sublime en la Axarquía.

Se van los pueblos,
camino de la Axarquía,
gritando a voces,
ole! que ole! mi Andalucía,
van dejando patente en el camino
que es el Sol de Andalucía.

Ya se aleja la partía,
ya se queda llorando Andalucía,
por la muerte del bandolero
José Maria!

No me llores serrana mía,
que yo me apellido Utrera,

y llevo sangre de Andalucía.

Poema de

Pedro Utrera.

La luna blanca y plateada

Foto de- Pedro Utrera

LA LUNA BLANCA Y PLATEADA


Soñé que había quedado con la Luna,
camino del puente de las barandas,
mi sombra era alargada,
ella blanca y plateada.

Desde mi verde olivar,
rompe su cerco la Luna,
entelequia en mi balcón,
la nieve brillaba en su esplendor.

Mira, que mira, mira,
mira que ella me esta mirando,
aquella Lunita clara,
que a mí me está enamorando.

Mira, que mira, mira,
mira que ella me sigue mirando,
bajo el puente de las barandas,
ella conmigo se está bañando.

He soñado con la luna,
y de ella me he enamorado,
que le digo yo a mi amada,
si de las dos, estoy enamorado.

Desde un lugar Extremeño,
fugaces las estrellas,
que desaparecen al instante,
yo les pido un deseo,
que donde me lleve el corazón,
que me lleve mi barcaza,
para seguir siendo tu amante,
aunque te parezca una metáfora.

Me desperté de mi sueños,
implorando perdón
¡qué cosas tiene la vida!
¡qué cosas tiene el amor!

Poema de

Pedro Utrera.

martes, 12 de agosto de 2008

Hervás, la más hermosa de Extremadura

FOTO DE PEDRO UTRERA

Hervás, villa extremeña histórica,
insertada al norte de Extremadura,
soy amante de tu hermosura,
y del embrujo de tu amor,
porque tú eres,
la más hermosa de Extremadura.

Divisorias de llanuras y horizontes,
cerezales y castañares
que se ciñen formando olas,
al paso del vecino cañón crujiente ,
el bohemio en las alturas,
convertido en águila imperial,
para que nadie te ofenda, Hervás.

Barrio Judío Hervasense,
calles empedradas de tradiciones judías
sinagogas hechas con amor y encaje,
y la imagen de Pérez Comendador,
símbolo de la escultura, el amor y el arte.

Pinajarro y su chorrera trepidante,
galopa desmelenada ante los ojos de Dios,
sin cobijo de nadie.
Río Ambroz, y su puente romano,
colores dispares en torno a su alrededor,,
donde las pinceladas del pintor Acera,
reflejan la belleza de un pueblo al natural.

Gracias Hervás.,
gracias por ser tan buena y sincera,
porque gracias a tu belleza,
me enseñaste a ser poeta.

Poema de
Pedro Utrera.

Emilio González de Hervás - Poema del Cante Jondo

HERVÁS-FOTO DE PEDRO UTRERA


Como se trata, de nuestro poeta,
yo voy a meterme,
en su faceta.

Nació en la villa de Hervás,
el poeta del cante jondo,
que marco una trayectoria,
en los entresijos de flamenco.

Como un nómada sin rumbo fijo,
fuiste trovador de caminos,
pregonaste su Nombre
y no te importo, sacrificar tu apellido.

Vamos, Emilio González de Hervás.
Vamos a recitar,
poeta de los poetas,
guitarras te lloran por bulerías,
y los cantaores de cante grande
con poderío proclaman,
tu nombre a los cuatro vientos,
porque tú poeta, naciste,
con la inspiración en tu pueblo.
Hervás, tu tierra y tu gente,
que te llevaste contigo
grabado a fuego y pasión.

Emilio González de Hervás,
te fuiste, y no te fuiste,
porque aún el sol
te sigue alumbrando
a las claritas del día,
y la sierra de Hervás,
te canta por solea.

Poema de

Pedro Utrera.

El río cristalino

RIÓ LA TEJEA-FOTO DE PEDRO UTRERA


Camino del puente de las barandas,
he quedado contigo a solas,
desde anoche que quede contigo,
que larga se me ha hecho la espera,
que no he dejado de pensar en ti,
pensando que tu a mi no me quisieras.

Siempre que hubo fuego en el amor,
hubo esperanza ciega,
pero hay que estar vigilante,
para que siga encendida la vela.

Que larga es tu ausencia
mi amor de madrugada,
más aquel silencio de sus pasos,
crujen con las nubes de su aliento
empañando madrugadas.

Larga ausencia
y mi amor que no llega,
mi Corazón palpitando
sediento de amor espera.

El río cristalino suena,
pedestal vacío sin ella,
pero el circulo de una piedra
rompe silencio en ella.

Perdona mi amor
por mi ausencia,
mas quería saber
si el amor tuyo y mío vela.

Calla mi amor,
que las nubes están serenas,
porque dicen que hay
vendavales de amores en la tierra.

Poema de

Pedro Utrera.

Por tierra de Extremadura, amanece con fuego

Amanece con fuego
Pasó a paso,
rompe fuego,
para ti no hay tregua
ni horizonte
que te detenga,
porque con tu nobleza
salvaje en la dehesa,
demuestras que eres
el más fuerte.
Fuerte, como él más fuerte,
salvaje,
cuando te privan de libertad,
y nobleza, cuando el trapío
de tu gente quiere calma.

Adiéstrate en la man
toro de casta,
que Extremadura,
vibra de amor y de esperanza.

---------------------------
Amanece con fuego,
y con su aullido,
rompe un silencio,
de alborada sin espejos.

Tu dejas nubes
de polvo y aliento,
y como un hito en tu feudo,
tu provocas al mundo entero.


Poema de
Pedro Utrera.

Dueño de tu alcoba (1999)

Tania- en la ceña del molino

Hermosa y bella
Como el amanecer,
Camina jadeante de hermosura
ante el atardecer,
en las noches de luna clara
la silueta de su figura
cabalga desmelenada
con el rocío de la mañana;
Con su cuerpo al desnudo
en la chorrera, espuma blanca
con lagrimas de pureza.
La ceña del molino la venera,
con aromas de flores en primavera.
El río cristalino suena
pedestal vació y sin ella,
pero el circulo de una piedra,
rompe silencio en ella;
Perdona mi amor por mi ausencia,
es que tengo celos del aire,
celos de la primavera.
Que nadie se atreva a enamorarte,
que yo soy el dueño de tu alcoba.
Poema de
Pedro Utrera.

Dedicada a mi hija Lorena

LORENA

¡Oh mi niña Lorena!
naciste en primavera,
tu eres reina de las mariposas
de un sol de imagen morena,
que ejércitos de flores
rinden homenaje a tu belleza.

Tu eres inquieta
como las marionetas,
y un torbellino
de pétalos de seda,

Pero no temáis,
trigales y amapolas,
porque todo en ella
es amor y pureza.
Poema de
Pedro Utrera.

Dando la espalda a Castilla


Bebe, tierra de mi Extremadura, bebe,
de la misma agüita, que mi amada bebe,
laberintos de espejos, abigarrados,
libélulas se bañan al desnudo,
y yo me siento embrujado.

Entre riscos y picachos,
se encuentra el Norte de Extremadura,
un oasis escondido en el Universo.

Un lugar donde nadie es forastero,
ni los Mares cambian de color,
pero tiene una alfombra verde
con tapices de colores,
que salpican mi balcón.

Lejos de los pueblos de color ocre,
el ritmo cambia, el color se rompe,
murmullo del viento en las hojas,
gorgojeo de pájaros en sus ramas,
aquí en el Norte de Extremadura,
es un remanso de paz, y belleza,
donde la multitud de manantiales
juegan al escondite,
con un dorado atardecer.

Hervás, con sus calles emblemáticas
de las tres culturas,
Por donde paso Unamuno
y la inmortalizo como mágica.

Dando la espalda a Castilla,
atardece de mil colores dispares,
donde no todo es llanura,
ni tampoco sol abrasador,
aquí en el Norte de Extremadura,
somos de otra casta,
y nos sentimos galantes en el amor.

Una mirada en su leyanda


Coria ciudad monumental,
insertada orillita del Rió Alagón,
con su puente de arco iris,
caminante sin descanso,
ante los ojos de Dios.
Puente romano,
como voy a olvidarte yo,
si la estampa de tu imagen
es el eco de mi voz.
¡Coria! Coria y su gente,
curtida y galante
bajo los rayos del sol,
una mirada en su leyenda,
y el embrujo de tu amor.
Coria, seminario
de curas y de monjes,
su catedral una reliquia
de arte en su historia.
Chupinazo de amor
alegría temor y arte,
el trapío está en las calles,
abanicos jadeantes de hermosura
ante los brazos de su amante.
Coria, con su castillo mirador,
se cuenta de tu leyenda
que el bobo de Coria burlón,
hizo creer a la gente, y no se tiro.
Coria visitada trajinante y bulliciosa
en sus calles de tradiciones toreras,
chupinazo de amor alegría y arte.
Coria San Juan, su Patrón,
y su estandarte,
una plegaria de amor para su gente,
y hasta pronto Coria del alma.

Mágica mi amada.


Mientras mi amada duerme,
placidamente,
bajo mi sabanas blancas,
los pajarillos dormitan,
bajo la hojarasca rosadas.

Tras de mi ventana observo,
La calle abajo,
como los farolillos encendidos,
hacen de la noche,
más mágica y más dorada.

Laberintos de callejuelas,
marañas entrecruzadas,
que la mirada de aquel niño,
felizmente observaba.

Detrás de su postigo,
y atónito en sus ojos,
una araña se deslizaba,
quedando aquel niño atrapado,
por el embrujo de aquella araña.

Mágico aquel niño,
en su habitación dorada.

Mágico los pajarillos,
que gorgojean,
tras sentir la madrugada.

Mágica mi amada,
que duerme placidamente,
sabiendo que es amada.

Mágico el poeta en su gesta,
que plasma lo divino,
esperando a la luz del alba


Como juguetes caidos.


Como un presagio
los científicos vaticinaron,
que la fuerza sobrenatural
no sabía de mentira ni de engaño.

Brava esta la mar,
bravo esta el universo
es algo sobrenatural,
que nos deja sin aliento.

Tsunami enfurecido,
maremoto destructivo,
no le pierdas la mirada
que puede ser tu enemigo.

Como juguetes caídos,
yacen por el océano índico,
miradas desoladas
de familiares entristecidos.

Impacto en la mirada,
el mundo se desgarra,
algo tendremos que ver,
Para tanta virulencia desatada.

Donde estabas tú mi Dios,
cuando ellos te necesitaban,
se fueron mar adentro
esperando tu llamada.

Celos de mi guitarra.

JUASMA GUITARRISTA
Celos de mi guitarra
Estoy sumido en la idea,
porque me dejo ella,
si éramos dos niños
que siempre vela.


Tal vez mi pobreza,
¡Oh! tal vez;
yo no era digno de ella,
que nena más bella era ella,
que sonrisa tenia en primavera,
porque mi guitarra no sienta la pena,
tal vez tenga celos de ella.


Camino sin rumbo,
buscándole a ella,
y con mis poemas
yo querer retenerla.


Desde un lugar inmenso
de arte y sabiduría,
rompe su cerco la luna,
entelequia en mi balcón
de canela fina en su esplendor.


Bellos ojos que me observáis
manos agitadas que a duras penas
mis poemas podrán callarla,
no estoy soñando amada,
te imagino suspendida
entre mis brazos;
y me convierto en vendaval
de ruiseñores; para ser tuyo,
y dueño de las flores.


Abre me el Corazón amada,
para yo suplicarte,
que mi guitarra está sollozando
al ver que mi alma se apaga.
Poema de-
Pedro Utrera.

La luna blanca y plateada (2006)

Foto- de Pedro Utrera- Canchos de Ramiro
Desde unrincon extremeño


Soñé que había quedado con la Luna,
camino del puente de las barandas,
mi sombra era alargada,
ella blanca y plateada.

Desde mi verde olivar,
rompe su cerco la Luna,
entelequia en mi balcón,
la nieve brillaba en su esplendor.

Mira, que mira, mira,
mira que ella me esta mirando,
aquella Lunita clara,
que a mí, me esta, matando.

Mira, que mira, mira,
mira que ella me sigue mirando,
bajo el puente de las barandas,
ella conmigo se esta bañando.

He soñado con la luna,
que de ella me había enamorado,
que le digo yo a mi amada,
si de las dos estoy enamorado.

Desde un rincón Extremeño,
fugaces las estrellas,
desaparecen al instante,
yo les pido un deseo,
donde me lleve el corazón,
que me lleve mi barcaza,
para seguir siendo tu amante,
aunque te parezca una metáfora.

Me desperté de mi sueños,
Implorando perdón
¡que cosas tiene la vida!
!que cosas tiene el amor!
Poemas de-
Pedro Utrera.

Aquel viejo tren


Se dice que el tiempo que pasa lo borra todo,
pero en nuestros recuerdos
queda la vivencia de las cosas
que tanto hemos amado.
Hoy me situó frente a tu escenario,
y siento que mi nostalgia
me hace sentirme decepcionado,
ya que los poderes fácticos
no tuvieron en cuenta,
a una sociedad, visiblemente afectada.
Eran otros tiempos
de amena y cosmopolita,
como el resoplido de aquel viejo tren
que se acercaba rítmicamente,
por la bella comarca, del valle del Ambroz.
Como un juguete caído y lagrimas en los ojos,
dejé de agitarte el pañuelo,
donde tu fuiste para mi,
vivencia de mi desvelo.
Como un mar de tierra dentro,
me dejaste varado en la orilla,
donde yo fui tu capitán,
y tu mi barquito velero.
Con tu ausencia el eco de mi voz,
se ha quedado en la nostalgia,
al igual que un niño, si no le das cariño
pierde el amor y la esperanza.

Al compás de maitines

Familia Utrera.

Mi memoria me hizo recordar,
que yo allí de niño,
ya había estado antes.
Al compás de maitines,
y el chirriar de mi ventana,
donde están los geranios
que yo allí contemplaba.
La misma troje,
la misma tinaja,
donde yo me escondía,
de los señoritos que mandaban.
Cuatro jarones´ en la lumbre,
humeante a la matanza,
el gato runrunea junto a sus nangas,
y yo con cabrillas en las patas.
El puchero junto al fuego,
con sus viandas escasas,
yo miraba y miraba!
y maldita sea mi estampa.
La misma cocina,
la misma ventana,
los mismos rayitos,
que entraban por mi ventana.
Sus paredes impregnada,
con aromas a tomillo y jara,
yo me llene de su fragancia,
contemplando la matanza.
El puchero junto al fuego,
como un ritual de cada mañana,
los garbanzos se cocían,
mientras yo al tocino le decía.
Pasa canetè,
que contigo nadie se mete,
acto y seguido le dije al chorizo,
alto mi capitán,
te vas a ver preso,
entre dos cachos de pan.
Poesía de-
Pedro Utrera.

No me llores madre mía (1978)

Estoy soñando despierto
porque dormido lo estoy viviendo,
recuerdas aquellas primaveras
de aleluya en nuestro pueblo,
de aquellos calcetines blancos,
de aquella camisa verde,
de aquel pantalón de pana negro,
que hacia juego,
a la bandera de nuestro pueblo.
¡Que feliz era mi madre!
Ver a sus hijos felices como nadie,
hoguera de sarmiento,
que junto con la aurora;
el gentío va diciendo,
quítale ese manto negro,
a la virgen soberana,
que el niño Jesús,
viene a su encuentro.
Pero no me llores madre mía,
que tus lágrimas son las mías,
pués recita conmigo esta poesía
que la llevo en el alma mía.
¡Oh madrecita mía!
nací de tus entrañas
envuelto en sangre y piedra,
hoy se diluye todo el bálsamo
porque no hay consuelo para ella.
¡Oh Virgencita mía!,
bendice esta madre mía,
que cada instante que pasa,
la quiero más que a mi vía.
Que valga esta poesía mía,
para todas las madres,
de la patria mía.